En Chile, aproximadamente el 58% de los residuos sólidos municipales corresponde a residuos orgánicos, representando más del doble de los envases y embalajes.
Sin embargo, la valorización de ellos es inferior al 1% del total de toneladas generadas cada año. Según lo anterior, la política nacional de residuos orgánicos tiene las siguientes metas dentro de sus objetivos principales al año 2030.
Llegar a 5.000 establecimientos educacionales con sistemas de valoración de residuos orgánicos.
Contar con un 50% de las instituciones públicas separando en orígen y valorizando los residuos orgánicos que generan.
Valorizar un 30% de los residuos orgánicos generados a nivel municipal.